Las puertas de la tienda de ropa Marel Mujer llevan abiertas más de 40 años en el pasaje de Don Sancho. Durante cuatro décadas, Isabel y Conchi Gómez, socias fundadoras y gerentes del negocio, se han encargado de seleccionar «con buen criterio» las prendas que lucen en sus percheros. «Dedicamos 30 días por temporada a probar y seleccionar la ropa. Queremos que la marca seamos nosotras, porque somos las que prueban y escogen lo que se vende», asegura Isabel Gómez.
Para celebrar la efeméride, una vitrina al lado de la tienda expone (y así lo hará por 40 semanas, con motivo de los 40 años) conjuntos de ropa del siglo pasado. «Son prendas que, al verlas, piensas: me las pondría hoy», afirma la gerente antes de subrayar que «lo único que perdura en los armarios es la calidad». «Si a ti te gusta un conjunto, cada vez que la veas vas a pensar: qué bonita es. Esa emoción es la que queremos conservar en la tienda y por eso hemos pedido a las clientas que nos aporten conjuntos que les despierten ese sentimiento», explica Gómez. Este escaparate, que luce en su parte superior la frase cumplimos 40 años contigo haciendo reañidad tus ilusiones, lleva ya 10 de las 40 semanas previstas mostrando a los viandantes la ropa seleccionada. Además, esta celebración coincidió con la concesión de la Medalla de Bronce de la Cámara de Comercio de Palencia.
Bajo la premisa de dar valor a las prendas del siglo pasado, desde Marel Mujer defienden «la sostenibilidad de la ropa». «Que perdure. Me la pongo yo, luego la regalo, se la pone mi sobrina... va pasando de manos y eso es lo sostenible», enfatiza la gerente.
LOS COMIENZOS. Las puertas de la tienda se abrieron en septiembre de 1983 gracias a la «ilusión» de Isabel, Conchi y Begoña. Esta última abandonó el negocio en 1986 tras marcharse de la ciudad. Por aquel entonces, tenían sección de mujer y caballero, aunque esta última la retiraron en 1990. «Hemos aguantado con mucho esfuerzo. Tuvimos que limpiar la tienda, hacer los arreglos, las compras, captar los clientes...era mucho trabajo. No obstante, seguimos adelante porque nos apasionaba», relata la propietaria. Durante todo este tiempo la gerencia se ha mantenido en las hermanas Gómez, la primera generación del negocio. «Llevamos 40 años porque empezamos muy jóvenes. Nuestra intención es seguir porque tenemos un equipo muy válido y una cartera de clientes estupenda», asegura. En relación con esto último, la gerente destaca que «hay amigos que comenzaron siendo clientes». «Conocemos a una cantidad importante, que son los que sostienen la tienda», añade.
En estas cuatro décadas, «la forma de vender ha cambiado mucho». «Hace 40 años salíamos a la calle, a viva voz, para captar clientela. Por aquel entonces, organizábamos desfiles en las discotecas para mostrar nuestros modelos», explica. «Ahora vendemos por las redes sociales». Si bien los hábitos de venta se han adaptado a los nuevos escenarios, desde MarelMujer consideran que no todo ha cambiado. «La ilusión por el trabajo bien hecho y por ofrecerle lo mejor a la gente sigue perdurando», concluye.
Cabe destacar que la franquicia, además de en la capital palentina, tiene dos tiendas en Alicante.