Solo han pasado unos días desde que el Real Madrid levantase el título de campeón de la Liga Endesa, pero la actualidad no descansa, especialmente en los despachos del conjunto blanco. La dirección deportiva del cuadro merengue debe perfilar cuál será la plantilla del próximo curso, aunque no será una tarea fácil. Sobre todo, porque aún debe resolver el futuro de alguno de sus jugadores como Mario Hezonja.
El alero croata finaliza su vínculo con el plantel de la capital el próximo 30 de junio, lo que urge al reciente campeón nacional a abordar una posible renovación. Sin embargo, un medio deportivo a nivel nacional informó ayer que el jugador balcánico habría alcanzado un acuerdo con el Barcelona.
Horas después el cuadro azulgrana por medio de una fuente autorizada, aclaró que no existe «ningún tipo de acuerdo» para fichar al exNBA y que no se convertirá en nuevo integrante del conjunto culé.
Según la misma versión, la entidad se interesó en el futuro del croata antes de la fase final de la Euroliga, al existir interés por todas las partes, pero «nunca se llegó a firmar nada», según la misma fuente, porque no se cerró «ningún tipo de acuerdo" y posteriormente el Barça ha valorado «otras opciones que le parecen mejores».
Otro elemento que ha entrado en juego podrían haber sido las recientes declaraciones de Hezonja sobre su deseo de continuar en el Real Madrid y la animadversión despertada por los aficionados barcelonistas.
«Me siento muy cómodo aquí, son mi familia, me han recibido con las manos abiertas cuando la gente estaba hablando mal», llegó a comentar el croata al finalizar el tercer encuentro de la final de la Liga ACB.
De hecho, por todo ello, el bloque catalán ya se ha movido en diferentes direcciones y ha vuelto a interesarse en el escolta Kevin Punter, jugador del Partizan que estuvo a punto de firmar la pasada temporada.
El norteamericano es una de la prioridades en el nuevo proyecto que liderará desde el banquillo Joan Peñarroya, tras la destitución de Roger Grimau.