El rector de la Universidad de Valladolid (UVa), Antonio Largo, y la consejera de Educación de la Junta, Rocío Lucas, inauguraron ayer, en la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias (Etsiiaa) del campus palentino, un invernadero de contención biológica Nivel 2 (ICS2), que es el primero de estas características en Castilla y León. Se utilizará para estudios con especies patógenas invasivas y permitirá la recreación artificial de las nuevas condiciones en que se desarrollarán los bosques y cultivos bajo la influencia del cambio climático. Se trata de una instalación necesaria para la realización de ensayos de patogenicidad, evaluación de resistencia de cultivos y especies forestales frente a patógenos de cuarentena y ensayos de biocontrol de los mismos.

 El catedrático de Patología Forestal y coordinador del Grupo de Investigación Reconocido (GIR) en Manejo Forestal Sostenible, Julio Javier Díez Casero, afirmó que la infraestuctura es una «gran oportunidad» para Castilla y León y la UVa puesto que entran a competir en la «champions de la investigación». «Permite trabajar en algo tan importante como la globalización, que implica la entrada de nuevos organismos patógenos cada poco, y el cambio climático», explicó, para añadir a renglón seguido que esta dotación «posibilita abordar todos esos problemas de una forma eficiente y siguiendo las reglas básicas en este tipo de asuntos». 

«Hasta ahora trabajamos con organismos que realmente no tiene demasiada peligrosidad, pero los nuevos hay que empezar a conocer sus características y eso solo se puede hacer en una infraestructura como esta. Es una buena oportunidad para el campus, la provincia y la ciudad, que se lo merece», concluyó.

El rector de la Universidad de Valladolid, Antonio Largo, hizo hincapié en que esta instalación «pionera» en la Comunidad  propiciará «investigaciones punturas de gran impacto en un sector que es crucial para Castilla y León, anticipándose, a través de simulaciones, a los efectos que puede tener el cambio climático sobre distintas especies forestales y agrícolas».

Tras incidir en que la dotación fue impulsada  bajo la coordinación de Julio Javier Díez Casero por el GIR en Manejo Forestal Sostenible de la Etsiiaa -«puntero, con impacto a nivel internacional  gracias a su capacidad investigadora»-, Largo destacó, asimismo,  que este invernadera de seguridad biológica estará a disposición de todos los grupos de investigación que lo requieran.

El proyecto, con una inversión de 360.000 euros, se llevó a cabo con financiación de la red Infrared en Castilla y León, cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) en 2022. La consejera de Educación, Rocío Lucas, anunció que «en breve» saldrá otra convocatoria Infrared dotada con 2,5 millones de euros para «seguir avanzando». La  dotación inaugurada ayer «nada tiene que envidiar» a otros invernaderos de España y Europa, afirmó, e incidió en que  «es  una infraestructura puntera que va a permitir dar un salto cuantitativo y cualitativo en materia de investigación en un aspecto fundamental para la Comunidad como es el agrícola».

 El representante de la empresa constructora, Agrocomponentes SL,  Tomás Albaladejo, destacó aspectos como la tecnonlogía 100 por 100 española, la eficiencia y la sostenibilidad de la dotación.