La galería parisina Olivier Nouvellet es casi como una segunda casa para Alberto Reguera, el pintor nacido en Segovia y criado en Palencia, no en vano fue la primera que mostró su obra fuera de España. Trabajan juntos desde hace treinta y nueve años, mantienen una estrecha y fecunda relación profesional, que nunca ha perdido la continuidad y ha ido reflejando la evolución artística de Reguera, además de contribuir de manera significativa al propio crecimiento y a la divulgación entre los aficionados franceses a la creación        contemporánea. 

La exposición actual sigue completando una serie de individuales de Alberto Reguera, cada una de ellas dedicada a un color, plasmado en los paisajes abstractos que centran la obra del artista español desde sus inicios. 

Las dos primeras, con el amarillo como eje, tuvieron lugar en los años 2018 y 2019. La llegada de la pandemia del coronavirus cortó la serie, que ahora han retomado galería y pintor, saltando al rojo. Autour du rouge se compone de catorce piezas, de distintos períodos y vertientes del quehacer de Reguera. Así, incluye pinturas expandidas que se salen del soporte y ganan en extensión, paisajes tridimensionales -el cuadro está pintado por todos sus lados- y otros planos, de carácter más ortodoxo.

En todas las obras está patente el juego habitual del pintor con las texturas y la materia, que le permiten conseguir esos paisajes en apariencia monocromos, pero que en realidad están cargados de matices y gradaciones, de forma que el rojo nunca es igual, siendo esencialmente el mismo.

La exposición se inauguró el 17 de octubre y se cerrará este sábado y viene a constituir una especie de reencuentro profesional con París,  un ámbito que nunca ha abandonado, pero que el covid-19 interrumpió en lo que al ámbito público se refiere.

antes, una performance. Y si Autour du rouge da continuidad a la serie de exposiciones monocromáticas de Reguera, hay que reseñar, asimismo, que el reencuentro profesional del pintor con París tuvo lugar el pasado mes de abril.

En aquella ocasión, realizó una performance pictórica en directo, con el título de La Seine s'envole, en el Instituto Cervantes de la capital gala. Su trayectoria en Francia ha sido y es significativa en la carrera del segoviano-palentino, que vive a caballo entre París y Madrid.