El portavoz de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, rechazó ayer las «condiciones previas» planteadas por el PSOE para abstenerse en la votación del próximo miércoles, 30 de octubre, sobre el límite de gasto no financiero para 2025, conocido como techo de gasto. Por ello, le pidió que reconsidere su posición inicial y que piense en Castilla y León, no en lo que sería «bueno» para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al tiempo que instó a Vox, antiguo socio del PP, a abandonar su negativa a apoyarlo.
Tras la ronda con representantes del Grupo Socialista y Soria Ya, así como con el procurador del Grupo Mixto Francisco Igea, el portavoz de la Junta insistió en que si se piensa en Castilla y León está «más cerca» el acuerdo, y añadió que hasta el miércoles hay «margen». «Sigo viéndolo difícil, pero tampoco lo veo imposible», remachó.
«Nunca veo malas intenciones en nadie», dijo Fernández Carriedo en su comparecencia, sin entrar a valorar si las condiciones socialistas son para «contentar» a Sánchez o con otra finalidad, ya que Tudanca exigió «reciprocidad» al PP, para que respalde la senda de estabilidad y los Presupuestos del Estado, así como las cuentas de ayuntamientos como León o Palencia, donde los socialistas están en minoría.
Carriedo lamentó que se hayan planteado exigencias que no tienen «nada que ver» con la Junta. «Aquí hemos venido a hablar de los problemas de Castilla y León», señaló el portavoz, así como a analizar los «retos y desafíos» que afronta la Comunidad, por lo que les invitó a que «reconsideren» su posición. Insistió en que la negociación debe circunscribirse al techo de gasto, no sobre otros ámbitos como los ayuntamientos, sobre los que, indicó, un consejero no puede fijar la posición, ni tampoco sobre el Congreso.
Por su parte, el secretario autonómico del PSOE y portavoz en las Cortes, Luis Tudanca, explicó que se plantean «seriamente» abstenerse, eso sí siempre que el PP actúe con reciprocidad. Aunque reconoció que es «difícil» lo que propone, señaló que «no es imposible», parafraseando al portavoz de la Junta.
«Ahora tienen que hacer algún movimiento», afirmó el portavoz socialista, quien señaló que «la pelota está en su tejado». Por tanto, Tudanca indicó que las negociaciones siguen abiertas en los próximos días para lograr un «punto de encuentro», tras la reunión de este viernes.
El dirigente socialista argumentó que la decisión de su grupo se ha adoptado por «responsabilidad, coherencia y pensando en el interés general» de Castilla y León y España, así como con «plena autonomía», puesto que plantea al PP no sólo que permita aprobar los presupuestos municipales en León o Palencia, sino los del Estado, con el fin de evitar que los partidos «más extremistas» condicionen las políticas presupuestarias del país.
Todos los partidos
Por otro lado, el portavoz reiteró que la Junta quiere dialogar «con todos» los partidos, pero sobre el límite de gasto no financiero o sobre el anteproyecto de los Presupuestos. Por ello, remarcó que la negociación debe estar vinculada a los documentos que han puesto encima de la mesa.
En cuanto a Vox, Carriedo lamentó que no acudieran a la cita, pero señaló que están «a tiempo» de reconsiderar su rechazo y deseó «algún encuentro» que permita «acercar» posiciones. En su opinión, la dirección nacional no ha permitido a sus dirigentes sentarse a negociar quizás, dijo, «por miedo» a que alcanzaran algún tipo de acuerdo.
Sobre las peticiones de Soria Ya, que planteó un helicóptero medicalizado, una avioneta de incendios, una ambulancia y los estudios de Medicina, el consejero advirtió que la Junta no acepta «privilegios», ni «tratos de favor», ni tampoco proyectos que supongan un «perjuicio» para el resto. Además, la próxima semana, tiene previsto reunirse con Pedro Pascual (Por Ávila) y la UPL.
Este fin de semana, según Carriedo, los grupos tienen la ocasión de «reflexiónar», de forma que el PSOE deje de lado su «posición inicial» de vincular cualquier avance a las cuentas nacionales y para que Vox se incorpore a la senda del diálogo. «Yo seguiré teniendo contactos», dijo, para añadir que siguen abiertos al diálogo.
Finalmente, el portavoz defendió la «hoja de ruta» de la Junta al presentar un «buen» documento de partida, en relación al techo de gasto y el anteproyecto de presupuestos.