CyL busca una «revolución» en la investigación en salud

SPC
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El plan estratégico para el periodo 2023-2027 aspira a convertirse en «palanca de transformación» del modelo sanitario, social y productivo

El consejero de Sanidad (i) y el rector de la Universidad de Valladolid firman un convenio para el IBioVALL. - Foto: Ical

La hoja de ruta de la Investigación y la Innovación (I+i) en salud en Castilla y León nace para provocar en cinco años una «revolución» de la masa crítica actual de unos 500 investigadores y disparar los ensayos clínicos y patentes, que en este último caso no alcanzan las 900 de media anual. Llega para convertirse en «palanca de transformación» del modelo sanitario, social y productivo de la Comunidad, y lo hace con las casi 50 acciones distribuidas en diez programas, en cuyo diseño han estado implicadas más de 3.000 personas, agentes internos y externos.
El Plan Estratégico de Investigación e Innovación en Salud 2023-2027, que se presentará en el marco del HUB Investigación e Innovación en Salud el 27 noviembre en Valladolid, servirá de revulsivo para afrontar la realidad y las necesidades sanitarias presentes y futuras de la población de Castilla y León, cada vez más asolada por la cronicidad, el envejecimiento, la dispersión geográfica y su heterogeneidad.

Llega en un momento de «oportunidad» para impulsar la I+i en salud a nivel organizativo de procesos y servicios, de terapias, de nuevas herramientas tecnológicas y digitalización, y nuevas formas de prevención y atención, en el que «la transformación de los sistemas sanitarios públicos es imprescindible para adaptarse a una sociedad más informada y participativa que demanda cambios en la atención y cuidados de las personas», según figura en el borrador al que ha tenido acceso Ical. 

Los objetivos pasan por una apuesta decidida por la I+i en salud; ampliar y consolidar esta actividad; fortalecer la estructura del sistema; fomentar el trabajo en red; potenciar las competencias; detectar, atraer y fidelizar talento; optimizar los procesos de gestión, así como avanzar en la digitalización y gestión de datos; difundir los resultados, y generar una cultura sólida de I+i, teniendo en cuenta que «el creciente desarrollo científico tecnológico constituirá un medio para conseguir el salto cualitativo hacia una nueva etapa en el desarrollo de la Investigación y la Innovación, que, junto a un liderazgo decidido y una orientación estratégica, permitirán mejorar su impacto en la sociedad».

Junto al refuerzo de la masa crítica en I+i en salud, quiere reconocer la labor investigadora e innovadora en la organización; sistematizar los procesos de gestión de la I+i; avanzar el la salud de datos y transformación digital, así como contribuir a la difusión de resultados, y alcanzar una mayor participación y visibilidad de la actividad de investigación e innovación.
El plan quiere poner las bases de la I+i en Castilla y León para los próximos años, la estrategia; consolidar los instrumentos, sus institutos de investigación biosanitaria, que estarán, además de en Salamanca y Valladolid, en León y Burgos, así como crear una revolución en todo el ecosistema, y lograr que todo lo que se investigue tenga recorrido.

También, completará la red de unidades de apoyo a la investigación en Atención Primaria y Hospitalaria, y de forma paralela, exprimirá la Ley de Ciencia, de modo que Sacyl creará la categoría profesional del investigador clínico, para que los profesionales puedan dedicar más tiempo a la investigación de manera reconocida.