La guardería El Gusanito ha cuidado, enseñado y jugado con más de 3.000 niños a lo largo de dos décadas. Las familias llevaban a sus hijos verano tras verano a las instalaciones ubicadas en la calle Mayor Antigua, para que pasaran allí la mañana, la tarde o el día entero. Pero esta ludoteca infantil cerrará definitivamente sus puertas el día 30 de agosto. 

Los más pequeños están disfrutando de su último verano en el local verde «porque se ha producido un cambio en la legislación y se ha establecido que todos los centros que atiendan a menores de cero a seis años tienen que obtener una licencia de la administración educativa. Además, hay una serie de condiciones que tienen que cumplir los establecimientos para poder obtener la licencia de escuela infantil. Un requisito es la necesidad de tener una zona exterior con unas determinadas condiciones para los niños», explica la directora del centro infantil  Yolanda Rodríguez. 

Esta guardería cumple con casi todas las exigencias establecidas por la Junta de Castilla y León. Sin embargo, no cuentan con una zona exterior reservada para los niños. A pesar de ello, «los monitores del establecimiento organizamos varias salidas con los críos, así que nunca necesitamos un espacio al aire libre dedicado para los más pequeños. Por otro lado, dentro de la zona de juegos hay un espacio que tiene aproximadamente 60 metros cuadrados», comenta Rodríguez. 

El Gusanito tiene una sala de juegos libres, un comedor y una zona de descanso en la que los más pequeños podían divertirse y socializar con otros niños. - Foto: ÓSCAR NAVARROEn lo respectivo al inicio de esta ludoteca infantil, «todo comenzó con un proyecto en el que teníamos pensado ocuparnos de niños, ya que siempre habíamos trabajado con adolescentes y nos encantaban estos entornos». Así que «hace 22 años tomamos la decisión de crear nuestro propio negocio. Además, tuvimos éxito porque era una idea muy novedosa y la estructura del local nunca se había visto en ningún otro sitio», afirma la directora de El Gusanito. 

La apertura del local tuvo lugar en diciembre de 2005, momento en el que había dos trabajadoras y solo tres niños. «Poco a poco, este proyecto fue en auge y  tuve que trabajar de lunes a domingo, así que me pasaba la vida aquí». Una vez fue asentándose el negocio, vieron las necesidades y la demanda de las familias, y la idea fue tomando forma. De hecho, «los talleres que realizaban por la mañana eran totalmente diferentes a los de las tardes», asegura Rodríguez. 

Una actividad muy popular de esta guardería era la celebración de los cumpleaños. Sin embargo, también llevaban a cabo más labores. «Por las mañanas trabajábamos con niños de cero a tres años, atendiendo las necesidades de las familias que nos traían a sus hijos. Además, el objetivo principal es que los críos aprendan a socializar junto a otros de su misma edad. En cambio, por las tardes, este local se convierte en una ludoteca para los que lo necesiten de manera puntual», explica la directora de El Gusanito. 

Otro servicio que ofrecía este centro es el del comedor. «Como la ludoteca abre de 7,30 horas a 20 horas de manera ininterrumpida, tenemos que tener todos los servicios para poder atenderles en cualquier momento», afirma la gerente del centro. Asimismo, los pequeños también pueden traer su propia comida de casa. Por otro lado, «el servicio de comidas y bebidas para los cumpleaños, está regulado por sanidad, quienes realizaban las revisiones necesarias para controlar que todo lo que ingieren los pequeños es saludable», apunta. 

Este establecimiento de 200 metros cuadrados tiene dos salas de trabajo, una zona de descanso para los más pequeños, una sala de juegos libres para los niños, equipada con el material y juguetes necesarios para que se diviertan; un comedor para que puedan comer allí y continuar sus actividades por la tarde, el despacho de dirección y los de las trabajadoras, una zona de baños públicos para los críos, y privados para las trabajadoras». «También hay una cocina para preparar los menús cada día, donde informan previamente a los cocineros si algún niño es celíaco o alérgico a algún alimento», recalca. 

LOS CLIENTES. Cabe destacar que todas las facilidades y servicios que ofrece la guardería, como el comedor, animan a muchas familias y acaban repitiendo la experiencia verano tras verano. 

De hecho, «hay muchos padres que tienen tres hijos y que están encantados con la idea de llevar a sus pequeños a El Gusanito, por lo que traen a todos a este espacio durante el periodo estival», asegura Yolanda Rodríguez.  

«Hay familias que acaban de tener hijos y que solían traer a sus pequeños aquí. Pero ahora sienten una pena inmensa porque no van a poder llevar a sus hijos a El Gusanito nunca más», resalta.