Tiene 34 años, pero Blanca Suárez ha trabajado con los directores más reconocidos de este país como Alex de la Iglesia, Imanol Uribe o Pedro Almodóvar. Pero fue la televisión la que la hizo popular con series como El internado, El barco o, más recientemente, con Lo que escondían sus ojos. En la comedia Me he hecho viral, de Jorge Coira, encarna a una joven que, a su pesar, se hace famosa en las redes sociales, tras pelearse en un avión con su marido que le ha sido infiel.
Supongo que nadie mejor que una actriz como usted para saber lo que se experimenta cuando uno se convierte en famoso. ¿Usted se ha sentido en algún momento de su vida observada o grabada?
Lo cierto es que cuando yo empecé no había tantos móviles, no estaba tan normalizado que todo el mundo llevase una cámara encima, la gente no te pedía fotos por la calle y, evidentemente, no había redes sociales. Al comienzo las redes sociales no eran tan bestias como ahora. Ahora nos enfrentamos a que son una narrativa en directo de lo que nos pasa en la calle, en casa, de a quien nos encontramos, etc…
Creo que por su profesión utiliza las redes pero, personalmente, pienso que son un arma de doble filo: Te dan pero también te quitan intimidad. No sé qué opina de esto
Son buenas para muchas cosas pero peligrosas si no se les da el uso correcto, y no se les pone unos topes y unos controles, desde fuera y también desde uno mismo. En la vida en general hay que apelar al sentido común y creo que a veces nos falta.
¿Usted ha tenido algún percance con las redes, como le ocurre al personaje de Mabel que interpreta?
No, y si lo he tenido no he sido consciente, porque no pierdo tiempo en el interactuar. No soy ni de meterme en Google, ni en los comentarios, ni ver los mensajes directos. No vivo en un mundo aparte pero no le presto atención porque es una realidad muy distorsionada.
Aunque Me he hecho viral es una comedia de puro entretenimiento, como actriz creo que es un personaje que le ha dado mucho juego…
Tenía muchas situaciones con las que lidiar, por muy inverosímil que parezca la parte terrorífica que tiene esta película es que la realidad supera la ficción. Creo todo lo que le pasa a Mabel es bastante factible que ocurra en la vida real a cualquier persona. Pero, claro, cuando ves que le pasa al de enfrente te ríes, pero a veces te puede pasar a ti, y entonces no te hace ninguna gracia.
Estamos ante una comedia gamberra. ¿Le parece difícil este género?
La comedia me parece un género súper difícil y en mi caso, que por cosas de la vida he participado en varias en los últimos años, te das cuenta de que cada una es diferente, hay muchos tipos de humor y cada uno tenemos nuestra manera de gestionarlo. Por eso, antes del rodaje hablé con el director porque me parecía que todos los actores del reparto debíamos estar en la misma línea.