La embajadora de Israel en España, Rodica Radian-Gordon, ha lamentado este jueves tener que dejar España "por unas decisiones vanas adoptadas por el gobierno español" que, en su opinión, no contribuirán a la paz en Oriente Medio.
Radian-Gordon, cuya misión en Madrid concluía este verano, fue llamada ayer miércoles a consultas por el Gobierno de Israel después de que el presidente del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, anunciase que España reconocerá a Palestina como Estado el próximo 28 de mayo, una decisión que también comunicaron Irlanda y Noruega.
"Lamento tener que regresar a Israel por unas decisiones vanas adoptadas por el Gobierno español, que no van a contribuir a la paz y la seguridad en Oriente Medio, ni van a facilitar la liberación de nuestros 128 secuestrados aún en manos de Hamás", ha publicado la embajadora en la red social X.
La embajadora alude a los israelíes que siguen como rehenes de Hamás desde el 7 de octubre de 2023, cuando la organización atacó Israel y mató a unas 1.200 personas y secuestró a otras 200.
La diplomática agradece también el "apoyo constante" de los amigos de Israel y ha dicho confiar en "que los lazos de amistad entre Israel y España sean más fuertes que las voces que aspiran a alejarnos".
El presidente del Gobierno español afirmó el miércoles al anunciar la decisión de reconocer como Estado a Palestina, que "este reconocimiento no es contra nadie", "no es contra el pueblo de Israel (...) y mucho menos contra los judíos".
Para Sánchez, el reconocimiento es a favor de la coexistencia de dos Estados y del Derecho Internacional, aunque asumió que la decisión pueda tener consecuencias porque algunos líderes israelíes no lo vean así.
"Somos conscientes de ello, y tengo que decirles que estamos preparados para asumirlas porque pensamos que el propósito de la diplomacia no consiste en no molestar a nadie, consiste en defender los valores y los intereses propios de forma pacífica", añadió Sánchez.
Israel también llamó ayer a consultas a sus embajadores en Oslo y Dublín, y convocó a los representantes diplomáticos de Noruega, Irlanda y España para expresarles su malestar por el reconocimiento del Estado palestino, algo que ya han hecho unos 140 países.