Era imposible que, coincidiendo en día y hora, el pleno del Ayuntamiento se mantuviera ajeno al debate de investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. La conexión entre el número 1 de la plaza Mayor y la carrera de San Jerónimo estaba ya predeterminada por una moción anunciada por Vox en la que exigía «el mismo trato económico que [Sánchez] está prodigando en otras partes de España, pero lo que no se esperaba -o al menos no constaba en el orden del día- fue una segunda moción de urgencia acordada por PP, Vox y Vamos Palencia «en defensa de la Constitución, la igualdad de los españoles y el respeto al Estado de Derecho».

Las dos se aprobaron y en ambos casos fue gracias a los votos de PP, Vox y ¡Vamos Palencia!. En las dos, también, se desató un enconado enfrentamiento y cruce de reproches, sobre todo entre las bancadas del PP y Vox y la del PSOE.

Ningún argumento fue original ni escapó a lo dicho las últimas semanas por las cinco formaciones políticas de la Corporación. Por un lado, la «repulsa a la Ley de Amnistía», el «rechazo a la concesión de privilegios económicos o fiscales», la negativa a la «carta blanca a los independentistas para romper España», las críticas a la lawfare o judicialización de la política», la «demolición del Estado de Derecho y del sistema Constitucional», etc.

Los cinco grupos reafirman en dos mociones sus diferenciasPor el otro, las acusaciones por «incitar la violencia» en las calles, el «daño a la convivencia», «la polarización de la sociedad», la apelación a que sigan los trámites parlamentarios y legales para determinar el futuro de la Ley de Amnistía...

En definitiva, nada que ningún lector, oyente o televidente medianamente informado haya leído, escuchado o visto las últimas semanas. Nada que no quedase claro en la multitudinaria manifestación del pasado domingo, en la moción aprobada en pleno de octubre y nada que no se haya dicho sobre las concentraciones frente a las sedes socialistas. Las dos mociones se aprobaron y PSOE, PP, Vox, ¡Vamos Palencia! e IU-Podemos recalcaron sus posturas a favor o en contra de la Ley de Amnistía y de los pactos que propiciaron la investidura de Pedro Sánchez. En Madrid, por supuesto, ni se enteraron, como suele ocurrir con todas las mociones de calado político nacional que se presentan y debaten en el pleno municipal.

Moción del 25-n. Lo que sí fue más inusual fue la aprobación de la moción presentada por IU-Podemos con motivo del Día Internacional contra la Violencia de Género, en la que solicitaba un paquete de medidas que van desde una mayor financiación para la lucha contra esa lacra social a la contratación de agentes de igualdad y la organizaciónde talleres para escolares.

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