La Audiencia Nacional deniega las medidas cautelares solicitadas por Ecologistas en Acción y la Asociación en Defensa del Soterramiento que pretendían paralizar las obras de la Línea de Alta Velocidad (LAV) hacia Cantabria a su paso por la capital palentina. Una medida que se tomó ante los "perjuicios irreparables" que originaba su ejecución, "por la imposibilidad o dificultad de reparación y con el propósito de que no se produzcan graves perjuicios para el interés público".
Los dos colectivos intentaron demostrar ante la Audiencia Nacional que el proyecto constructivo en ejecución disminuye el área de soterramiento del ferrocarril en casi 500 metros respecto al soterramiento de 2.740 metros que afecta a cuatro barrios de la ciudad como son el Cristo, San Juanillo, el Sector 3 y San Antonio. Sin embargo, el juez no lo ha considerado así y el portavoz de la Asociación en Defensa del Soterramiento en Palencia, Pablo Polanco, ha calificado, en declaraciones a Ical, la decisión de "varapalo".
Polanco ha anunciado, además, que la asociación ya ha dado el paso de recurrir la decisión judicial porque creen que la desestimación se basa en "un informe desestructurado y carente de argumentación".
Cabe recordar que también el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Palencia acudió a los tribunales por este mismo motivo y, en su caso, interpuso un recurso contencioso administrativo contra Adif para pedir la suspensión de las obras de Alta Velocidad hacia Cantabria a su paso por la capital. Una denuncia que presentó en solitario ya que finalmente optaron por no sumarse a la demanda ya interpuesta ante la Audiencia Nacional por Ecologistas en Acción.
Desde el Consistorio persiguen que sea la autoridad judicial la que determine si el proyecto constructivo presentado en noviembre de 2023 se ajusta a los estudios informativos de los años 2010 y 2018. Documentos que avalaban el soterramiento de las vías del tren en Palencia y que chocarían con los trabajos que Adif lleva realizando desde hace meses para construir la línea de la Alta Velocidad. "Ambas cosas son incompatibles", aseguró el concejal y primer teniente de alcalde, Carlos Hernández.
Además, y de forma paralela, desde el Ayuntamiento también han solicitado la suspensión cautelar de las obras y se espera que la resolución llegue en los próximos días.