La tenista rumana Simona Halep ha sido suspendida este martes por un período de cuatro años tras infringir el Programa Antidopaje de Tenis (TADP), según ha informado la Agencia Internacional para la Integridad del Tenis (ITIA) en un comunicado.
La entidad ha confirmado que un tribunal independiente ha suspendido a Halep, dos veces campeona de 'Grand Slam', durante cuatro años, después de que fuera acusada de dos infracciones distintas del TADP. El primero, un resultado analítico adverso por la sustancia prohibida roxadustat en el US Open de 2022, detectado mediante uno de los análisis de orina periódicos que se realizaron durante la competición. Y el segundo, relacionado con irregularidades en su pasaporte biológico.
Según la nota ofrecida por la ITIA, el tribunal independiente se reunió el pasado 28 y 29 de junio en Londres, escuchando a testigos científicos expertos en nombre tanto de Halep, que también prestó declaraciones, como de la entidad.
Más de dos meses después, el tribunal confirmó que la tenista cometió infracciones intencionales de las normas antidopaje en virtud del artículo 2 del TADP. Por la muestra de orina de Halep recolectada el 29 de agosto de 2022 en el US Open y en el ABP, a través de la recolección y análisis de 51 muestras de sangre proporcionadas por la propia jugadora.
El tribunal aceptó el argumento de Halep de que había tomado un suplemento contaminado, pero determinó que el volumen que la jugadora ingirió no pudo haber resultado en la concentración de roxadustat encontrada en la muestra positiva.
Por ello, afirmaron que no tenían motivos para dudar de la "firme opinión" unánime alcanzada por cada uno de los tres expertos independientes de la Unidad de Gestión de Pasaportes de Atletas (APMU) de que el "probable dopaje" era la explicación de las irregularidades en el pasaporte biológico de Halep.
La suspensión de la exnúmero uno del mundo se extenderá desde el 7 de octubre de 2022 hasta el 6 de octubre de 2026, aunque el caso sigue sujeto a apelación.
La directora ejecutiva de ITIA, Karen Moorhouse, reconoció que acogen "con satisfacción" la decisión del tribunal independiente, después de "un proceso de audiencia complejo y riguroso". "El volumen de pruebas que el tribunal tuvo que considerar tanto en el procedimiento de roxadustat como en el de ABP fue sustancial", añadió.
Moorhouse dejó claro que la ITIA siguió "los procesos adecuados" como lo hacen con cualquier otro deportista, "de acuerdo con el Código Mundial Antidopaje" y cumpliendo con "el propósito y responsabilidad de defender el principio de competencia justa en nombre del deporte".
Además, desde la WTA advirtieron de que "es de suma importancia que los jugadores conozcan las reglas del Programa Antidopaje de Tenis y las sigan". "El tribunal independiente ha emitido su fallo sobre el caso de Simona y, según el TADP, la decisión puede ser apelada ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo. La WTA apoyará las decisiones alcanzadas a lo largo del proceso y continuará siguiéndola de cerca", valoraron.