El Ayuntamiento anunció ayer que el próximo lunes, a las 9,30 horas, se cortará al tráfico el tramo de la calle Burgos comprendido entre la plaza de San Lázaro y la calle Berruguete. Se trata de la primera afección importante para el tráfico rodado de las obras de reurbanización del eje que comprenden Burgos, Don Sancho, La Cestilla, Menéndez Pelayo y Burgos, así como la plaza de Isabel la Católica.

La empresa Vías y Construcciones del Norte (Viacon) calcula que el corte de la calle Burgos se alargará dos semanas, lo que deberán tener en cuenta, sobre todo, aquellas personas que se desplacen en transporte privado o público. El cierre al tráfico afecta de forma importante a quienes deseen acceder al centro desde la glorieta de la plaza de San Lázaro, ya que no podrán hacerlo.  

De esta forma, la única manera de desplazarse hasta la plaza de abastos y sus entornos será desde la calle Don Sancho, por lo que no se podrá cruzar el centro desde las avenidas de Manuel Rivera y Casdado del Alisal. Eso no significa que las calles Don Sancho y La Cestilla vayan a estar cerradas a los vehículos, ya que sí se podrá circular por ella en ambas direcciones ya que, por el momento, sí será posible circunvalar el mercado municipal. 

Cabe recordar que la primera fase de las obras de este proyecto vinculado a la Zona de Bajas Emisiones se centrará exclusivamente en la renovación de la red de abastecimiento de agua potable en las calles Burgos, La Cestilla y Don Sancho.