Hace ya unos cuantos años que May Chaparro, aquella hermosa y bien modulada voz, dejó Cadena SER y, como suelo guardar las cosas que me importan o me llegan al corazón, miren por dónde en una cinta de casete de las que, cuando llegó el DVD, pasaron a mejor vida, encontré una grabación de cuando, por cariño de May, no por méritos propios, participé cada viernes, en un espacio que ella dirigía titulado A vuela pluma. Oí varias y, en una de ellas encontré lo siguiente: Cuando escribo este comentario de A vuela pluma, faltan 15 minutos para que el nuevo día 16, viernes, comience a contar sus horas. Cadena SER informa de que la cifra de víctimas palestinas asciende a 1.100 personas desde que comenzó el conflicto entre Israel, el todopoderoso y Palestina, condenada por decisión ajena a su voluntad, a vivir sin tierra pues le fue arrebatada para que los judíos la ocuparan. La crueldad entró en sendero equivocado. Los ataques de los integrantes de la organización extremista Hamás, y su proceder, hacen un flaco favor al resto de palestinos que desean vivir tranquilos. La actuación de Israel, desmesurada: no respeta civiles indefensos; un gato tiene acorralado a un ratón. Ayer, en la plaza Mayor, la periodista de esta Cadena, Carmen Cuesta, alzó su voz condenando la violencia y el dolor causado a seres inocentes, el manifiesto fue rotundo y claro, las palabras surgían con fuerza y fueron recogidas en corazón y mente por cientos de personas que rechazan violencia y abuso de poder. No son los mejores aliados para resolver un conflicto de años. A mi lado, una madre palestina acompañada de sus tres niños lloraba mientras sus frases eran coreadas, con auténtica emoción, por sus compatriotas. Quienes viven entre nosotros sintieron el calor de cuantos estábamos allí para acompañar su dolor contra la injusticia. Un hombre elevó su voz para decirnos en castellano que en su tierra, Gaza, mueren niños de pocos meses, mujeres mayores, y hombres de mediana edad y que ellos no entienden de luchas, ni guerras de religión, solo quieren vivir en paz. Estamos en 2024. Ya han muerto en esta guerra que nadie para más de 25.000 gazatíes. Si estamos asistiendo a lo que es un genocidio ¿por qué no se detiene? ¿Es más importante vender armamento?