El CB Villamuriel disfrutó y compitió

David Correia
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Las cerrateñas caen ante el Barça en los octavos de final del Campeonato de España de clubes

El CB Villamuriel disfrutó y compitió - Foto: Rubén Díaz (@fotografia.rdiaz)

Disfrutar y competir eran los objetivos del CB Villamuriel en el Campeonato de España de clubes cadete y los cumplieron con creces. Disfrutaron de una experiencia inolvidable peleando contra los mejores equipos de España, pero también compitieron con seriedad, alcanzando los octavos de final del torneo.

Las cerrateñas debutaban el domingo, midiéndose en la primera jornada de la fase de grupos al Alight Fundación CB Granada. El Villamuriel, liderado por su estrella Amelia Alonso (gran partido también de Iria Modino y Lucía Soto), se impuso 66-62, empezando con muy buen pie el torneo.

El lunes, en la segunda jornada (la más complicada), las cerrateñas se enfrentaban al potentísimo Spar Gran Canaria Maspalomas Costa Canaria, un equipo físicamente muy superior al palentino. Las canarias impusieron una superioridad corporal palpable para llevarse el encuentro (26-90).

Pese a esta derrota, el Villamuriel ya tenía asegurado el pase a los octavos de final. Solo faltaba por esclarecer si lo hacía como segundo o tercero de grupo. Para ello iba a ser clave el tercer partido de fase de grupos, en el que las cerrateñas se medían ayer a un Celta Zorka Recalvi que perseguía el mismo objetivo. Las palentinas estuvieron mejor, pero un mal último cuarto terminó llevando el partido a la prórroga. En la misma, las gallegas acabaron adjudicándose la victoria (63-59).

Con la derrota, el Villamuriel terminaba tercero en el grupo A, por lo que en los octavos de final quedaba emparejado con el Barça. El partido, que se disputaba esta tarde en el pabellón Fontiñas de Santiago de Compostela, terminó con la victoria del FC Barcelona por 71-27 y la mala noticia de la lesión de Amelia Alonso, que tuvo que abandonar la pista sin poder apoyar su pie izquierdo. Salió llorando desconsoladamente, apenada por no poder ayudar a su equipo en, seguramente, su último compromiso con la camiseta verdinegra antes de fichar por el Valencia Basket. Pero la plantilla, que es una piña, la reconfortó con un precioso abrazo final en una muestra de lo que significa el deporte y lo que debe representar. Fue un final agridulce para un equipo cadete del Villamuriel que tiene que estar muy orgulloso de lo que ha conseguido esta temporada.