El Ayuntamiento descarta los trabajos nocturnos de Adif

Pablo Torres
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La empresa adjudicataria, Lantania, propuso a los vecinos marcharse de sus viviendas para ejecutar las obras de noche

Varios vecinos contemplan las obras. - Foto: Sara Muniosguren

La disputa entre los vecinos del Camino Viejo de Husillos y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) cobra más fuerza a medida que avanzan las actuaciones en la zona norte de la capital para la construcción del denominado salto del carnero, un proyecto que se enmarca en los trabajos de la Línea de Alta Velocidad (LAV) a Cantabria, concretamente en el tramo entre Palencia y Palencia-Norte.

El pasado viernes, la empresa adjudicataria de las obras, Lantania, advirtió a los residentes de su pretensión de ejecutar las actuaciones en horario nocturno a partir del día 22, algo que, de acuerdo con la alcaldesa de la ciudad, Miriam Andrés, no va a tener lugar. «Palencia tiene una ordenanza municipal que prohíbe los ruidos y las obras por la noche y la normativa hay que cumplirla, sea Adif o quien sea», anunció la regidora, quien subrayó que los trabajos nocturnos quedan «completamente descartados». «La gente tiene derecho a su descanso  y eso es lo que vamos a garantizar», subrayó. 

La primera edil aseguró que, en caso de que el administrador ferroviario solicite el pertinente permiso para trabajar por la noche, pues todavía no lo ha hecho, le informará de «cuáles son las condiciones» y de la imposibilidad de hacerlo en dicho horario. En caso de no acatar la normativa, Miriam Andrés manifestó su intención de enviar a la Policía Local. 

Adif, a través de Lantania, propuso a los vecinos de la zona abandonar sus viviendas para que los trabajos se puedan llevar a cabo en horario nocturno. Según denunciaron varios residentes del Camino Viejo de Husillos a Diario Palentino, si estos accedían y firmaban la propuesta del administrador de infraestructuras, estas actuaciones se iban a poder llevar a cabo por la noche. «Ni hemos firmado ni vamos a firmar», expresó Javier Gredilla, uno de los vecinos afectados. «Esto es indignante. Yo no tengo por qué irme de mi casa», criticó. 

Pese a la negativa del equipo de Gobierno sobre los trabajos nocturnos, muchos vecinos desconfían de que realmente se lleguen a parar. «La alcaldesa también dijo que no iban a dejar hacer muchísimas cosas y mira cómo estamos», denunció Pilar González, otra de las vecinas afectadas por las obras de la LAV. «Hemos estado reunidos con el Ayuntamiento muchas veces y aquí lo único que se están cumpliendo son los objetivos de Lantania», añadió Gredilla. 

VÍA ALTERNATIVA. La empresa adjudicataria también informó a los vecinos del corte del tráfico en el Camino Viejo de Husillos con motivo de los trabajos para mover el colector del agua. Si bien estaba programado para ayer, este todavía no se ha ejecutado. 

La alcaldesa capitalina subrayó que el permiso para esta actuación se concederá si también se adecúan las vías adyacentes a la afectada para ofrecer una salida alternativa. En este sentido, los residentes de la zona reclaman el arreglo del Camino de San Antón. «Esta alternativa se la hemos tenido que dar nosotros a la empresa y a la policía», declaró Pedro Gredilla, otro de los vecinos afectados que da voz a las reclamaciones de la zona. «Es un camino intransitable. La solución que damos es unirlo con el Camino Viejo de Husillos y adecuarlo. Así nos veríamos afectados solo dos meses, y no año y medio», recalcó. 

«Si se pone alguien enfermo, aquí no puede venir una ambulancia. Tampoco llega Correos, el camión de la basura… No tenemos los servicios mínimos», achacó Javier Gredilla. «Nos van a cortar un camino y nada está hecho», denunció en la misma línea Pilar González. Y es que, hasta la fecha, no se ha comenzado a actuar en ninguna posible solución para permitir los accesos y salidas de los vecinos. 

Cabe señalar que el problema se acentúa teniendo en cuenta que varias viviendas no tienen salida hacia una vía adyacente. En estos casos, los propietarios se encuentran con el muro de contención de ruidos a un metro de sus puertas, lo que dificulta todavía más los accesos a sus casas. «Lo que pedimos es que, a parte de los problemas que ya nos está dando la obra, nos den salidas para que entren varios servicios y que nosotros podamos entrar con el coche», reivindicó Pedro Gredilla. 

Las obras del salto del carnero serán una de las muchas cuestiones que la regidora tratará con el ministro de Transportes, ÓscarPuente, con quien se reunirá en la sede del ministerio, en Madrid, el próximo miércoles 24 de julio.  

En ese encuentro, la primera edil exigirá al ministro una postura «clara, sin miedo y sin tapujos» respecto al soterramiento de las vías, un poryecto que, en palabras de Puente, «es compatible» con las actuaciones que está actualmente llevando Adif en elCamino Viejo de Husillos.