Palencia fue una de las ciudades en las que ayer los sindicatos (UGT, ANPE, USO, Adide, USIE, UFP, SUP, Acaip y SIAT) se concentraron a las puertas de la sede de Muface para reclamar una solución definitiva para la mutua. Así, fueron alrededor de 130 personas, según fuentes policiales, las que se dieron cita en el número 10 de la avenida de Manuel Rivera.
Javier Pajares, de ANPE Palencia, explicó que el objetivo de la concentración era «visibilizar la importancia de renovar el concierto sanitario de Muface y las graves consecuencias de no hacerlo». Señaló que la mutua «es una institución clave para más de un millón de funcionarios en España, ya que permite elegir entre sanidad pública y entidades privadas concertadas, reduciendo la presión asistencial sobre hospitales, atención especializada, servicios de urgencias y centros de salud».
Si este concierto no se renueva, «las repercusiones afectarán a toda la ciudadanía», y al respecto se expuso que se sobrecargará el sistema público de salud, y es que «7.000 beneficiarios en Palencia y más de un millón en toda España» se incorporarían masivamente, «colapsando servicios y aumentando listas de espera».
Otra de las repercusiones mencionadas fue la del deterioro de la calidad asistencial, con «una atención más lenta y menos personalizada, poniendo en riesgo la salud de toda la ciudadanía».
También hablaron del impacto económico, en tanto «una integración improvisada desequilibraría los presupuestos dificultando la sostenibilidad del sistema».
«Exigimos que se concrete lo antes posible un acuerdo estable, razonable y satisfactorio, que garantice la asistencia y calidad sanitaria de los empleados públicos, en la que los servicios médicos ofertados no se vean mermados, sino que, por el contrario, mejoren sus prestaciones», según el manifiesto.
Los sindicatos reclaman, tanto al Gobierno como a las aseguradoras, un acuerdo que «dé tranquilidad y calma para su asistencia sanitaria a alrededor de 1,5 millones de personas».
Además, exigen «más transparencia» por parte del Gobierno y de la propia mutualidad en este proceso, y la participación de los sindicatos en el mismo.
Según recoge el manifiesto al que se dio lectura, los sindicatos exigen «celeridad» al Gobierno para cerrar un nuevo convenio y poner sobre la mesa un plan de viabilidad para la asistencia sanitaria del funcionariado público. Por otro, critican a unas aseguradores «insaciables» que, «con el argumento de que el modelo Muface está infrafinanciado, quieren aumentar sus beneficios económicos a costa del Estado, y a costa de la selección de riesgos, es decir, a costa de derivar a la sanidad pública los casos más graves y caros de atender».