Lo que comenzó como una montería normal, incluso más escasa que de costumbre, se saldó con la pieza más grande cazada por el palentino José Luis Gutiérrez, siendo también una de las más grandes vistas en los cotos de la provincia. Nada menos que 143 kilogramos fue lo que marcó en la báscula el jabalí que este aficionado cinegético capturó el pasado día 13, en un coto ubicado en la comarca de Tierra de Campos. 

Una mañana con niebla y escasas presas fueron la estampa con la que Gutiérrez y sus acompañantes comenzaron la batida. «Esperamos a que se levantara la niebla. Había bastantes huellas, pero no conseguíamos dar con los animales», relata el cazador. 

Todo cambió cuando llegaron a la parte final del coto. «Había unos maíces y un arroyo con mucha vegetación. Ahí fue donde, nada más entrar los perros, comenzaron a cantar y supimos que allí había un jabalí», recuerda Gutiérrez, quien ante el aviso de los canes se posicionó para poder batir al animal. 

Fue en ese momento cuando el jabalí salió de su escondite. «Me quiso hacer la jugarreta, pues me salió para un lado y después fue hacia el otro», afirma. Pese al movimiento del mamífero, el cazador pudo batirlo a una distancia de unos 30 metros.  «Si en lugar de a 30 metros le hubiera disparado a 100, hubiera seguido corriendo», afirma. «Hice un tiro más por si acaso, ya que ha habido muchas ocasiones en las que disparas, te acercas al animal, y se levanta», asegura. 

Esta captura es la más pesada dentro de los trofeos de José Luis Gutiérrez, si bien, como él mismo reconoce, no es la que tiene «mayor boca». Las dimensiones del animal hacen de su captura un hecho excepcional, tanto dentro de la comarca como en el conjunto de la provincia. «Para verlos de este tamaño tienes que irte a Rumanía o Turquía», concluye.