La biblioteca Bernardo el Carpio de Aguilar de Campoo se vistió ayer de gala para entregar el premio Águila de Poesía, que en su décima novena edición recayó en el autor madrileño Amando García Nuño por Aquel gesto como de andar huido.

Instantes antes de la gala, ponía en valor a este periódico la apuesta por este tipo de certámenes y por la cultura en general del Ayuntamiento montañés. «Hay que diferenciarse por algo, y no hay nada que te haga más distinto que la cultura, que es casi como una especie en peligro de extinción. Esta apuesta que hace Aguilar tiene mucho mérito», subrayó el galardonado.

Sobre este texto con el que se impuso a los otros 109 aspirantes, destacó su mirada a esas personas que muchas veces pasan desapercibidas. Un poemario que verá la luz gracias al Consistorio, que editará una primera edición, de la que el ganador recibirá la quinta parte de los ejemplares. El resto será repartido entre amantes del género, bibliotecas y centros culturales.

El acto contó también con la participación del también escritor Jesús T. Medrano Gabilucho. El grupo Yedra Folk puso la nota musical a la velada cultural.