«Si respeta el tiempo, viene una campaña con buenos precios»

Jaime Sánchez Cuéllar
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El ajo ha perdido esta campaña un 16% de la superficie en España al situarse en 20.926 hectáreas, 3.950 menos. Castilla-La Mancha lidera la producción (15.535 ha), seguida por Andalucía (2.410 ha) y Castilla y León (1.944 ha). La mala cosecha del año

«Si respeta el tiempo, viene una campaña con buenos precios»

El ajo ha perdido esta campaña un 16% de la superficie en España al situarse en 20.926 hectáreas, 3.950 menos. Castilla-La Mancha lidera la producción (15.535 ha), seguida por Andalucía (2.410 ha) y Castilla y León (1.944 ha). La mala cosecha del año pasado, unida a la prohibición de productos fitosanitarios, restan atractivo a un cultivo que, sin embargo, espera una buena campaña de precios por la situación internacional. Así lo comparte el presidente de la Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajo (ANPCA), Juan Salvador, que recientemente se ha reunido con el comité de trabajo que forman Francia, Italia y España para impulsar este cultivo. 

¿Cuál es la situación del cultivo del ajo tras la reunión de trabajo del comité de los tres principales productores de Europa? 

Se trata de una reunión anual que lidera España con la mayor superficie de producción, seguido de Italia y de Francia. Hemos analizado la situación respecto al uso de fitosanitarios. No existe una orden en la Unión Europea porque cada país cuenta con armas diferentes. Vamos a pedir a la UE que arbitre un reglamento común para que los tres países tengan las mismas armas.

¿España está siendo más restrictivo que Francia e Italia?

Es un cúmulo de circunstancias. El Ministerio es más papista que el Papa y muchas veces nosotros mismos nos ponemos los límites. Lo único que pretendemos es que, ante una enfermedad o ante un problema, podamos tener por lo menos algún producto fitosanitario. Hemos analizado los últimos cinco años y no existe un criterio común en los tres países productores. Nos encontramos, por ejemplo, con un problema muy grave porque llevamos dos campañas sin ningún herbicida autorizado para hierbas de hoja ancha, y eso nos está llevando a una reducción de la superficie de siembra. 

¿Qué líneas seguirá vuestro nuevo plan estratégico?

Creemos que países emergentes como Egipto o Turquía están incrementando sus producciones. La única vía para competir con ellos es mejorar las semillas, investigar en I+D para que los agricultores puedan tener rendimientos por hectárea más altos. Porque si hablamos de mano de obra, con estos países no podemos competir. 

¿Hay interés en invertir en la mejora de la semilla de ajo?

El ajo se considera como un cultivo menor. Es así porque la superficie es poco representativa frente a otros cultivos hortícolas. Pero hay que entender que es un cultivo social que tiene todavía muchísimo peso específico en muchos pueblos, tanto de Castilla y León como de Castilla-La Mancha, y hay que darle su importancia. 

Entramos en la primavera, ¿cómo se está desarrollando la campaña? 

Venimos de un año 2023 que ha sido el peor, tal cual lo digo, de la historia. Este año, de momento, los cultivos se están comportando correctamente. Esperemos que no suceda lo del año pasado, porque la verdad que el sector necesita una campaña buena y esperemos que la climatología nos respete, cosa que el año pasado no sucedió.

Respecto a la situación de mercado, ¿acompañarán los precios?

Todo indica que vamos a entrar con una campaña nueva para mayo sin stock en las cámaras frigoríficas. Lo estamos viendo en Europa. Hay escasez de producto por los bajos rendimientos. En el ajo morado tuvimos una caída del 60%. De momento el mercado a nivel mundial está estable, entonces preveo que vamos a tener un inicio de campaña muy bueno si la climatología nos acompaña. Los precios de referencia en China no son bajos. Suramérica, que acaba de terminar campaña, Argentina, Perú y Chile están comercializando su ajo a precios muy elevados con respecto a otros años… 

¿En función de lo que dicte China?

Sí, al final tenemos que pensar que China representa casi el 80% del ajo que se comercializa a nivel mundial. España tiene que liderar la comercialización en la UE, como lo está haciendo, e intentar mantener mercados internacionales. Aunque preveo que con este incremento de costes que llevamos sufriendo en los últimos tres años vamos a perder mercados que antiguamente eran tradicionales como es el caso de Brasil o Taiwán. Espero que podamos mantener un mercado muy interesante como es Estados Unidos.

ARCHIVADO EN: Precios, Castilla y León