Vinícius Júnior llega a su segunda final de la Liga de Campeones con el objetivo de emular su actuación de hace dos años. Gol y victoria. En caso de repetirlo, el brasileño confirmaría su condición de favorito a levantar el próximo Balón de Oro tras una primera mitad de 2024 en la que ha sido determinante en partidos grandes. 

Diez goles y 13 asistencias suma el atacante del Real Madrid en 16 partidos de eliminatorias de la Champions. Palabras mayores. Tres tantos en octavos de final, dos en cuartos, cuatro en semifinales y uno que dio al combinado merengue la Decimocuarta en la final de París, ante el Liverpool.

Además, contra el Bayern de Múnich, en la vuelta de semifinales de este curso, no le hizo falta marcar para, más allá del protagonismo de Joselu Mato con su doblete en dos minutos, ser uno de los protagonistas del encuentro.

Avisó Thomas Tuchel en la previa, en la sala de prensa del Santiago Bernabéu, que parar al brasileño iba a ser imposible. Y así fue.

Kimmich, jugando de lateral derecho y lejos de su posición de pivote, sufrió en cada duelo frente a un Vinícius que firmó su compromiso con más regates completados en el torneo: 13.

Otro enfrentamiento determinante para el jugador más decisivo de esta Liga de Campeones. Con cinco goles y cinco asistencias -el que más, empatado con Marcel Sabitzer-, en nueve partidos de la presente edición de la Champions.

Actuaciones de élite en la máxima competición de clubes del mundo que coinciden con otras del atacante del cuadro de Chamartín en choques importantes que le colocan como un factor letal de cara a la final, como lo fue en la Supercopa de España ante el Barcelona.

Triplete en 39 minutos para el brasileño, en uno de sus grandes partidos en su ya larga trayectoria en el Real Madrid, al que llegó en verano de 2018 y, desde entonces, no ha dejado de crecer. Tanto que aspira a ganar el Balón de Oro.

Y lo hace tras una campaña en la que sufrió sus dos primeras lesiones musculares, que le tuvieron apartado de los terrenos de juego un total de 75 días.

Temporada difícil

«El inicio fue complicado por las lesiones. Pero de lo malo hay que sacar lo bueno y la lesión me hizo mejor jugador, porque tuve tiempo de entrenar y ver los partidos. Tuve tiempo para mí. Fue una temporada complicada, pero preparé mi cabeza para estar en mi mejor versión en el segundo tramo. Me he preparado bien y siento que estoy en mi mejor versión», rememoró 'Vini' el pasado lunes.

Una mejor versión como futbolista en la que, de nuevo, Ancelotti fue clave. Cuando el italiano volvió a hacerse cargo del equipo español en 2021, el brasileño vivió un momento de inflexión en su carrera. Un crecimiento exponencial que ha logrado también este año desde otra posición, participando como 'falso nueve' además de en su habitual lugar en el costado izquierdo.

«A Ancelotti le agradezco el haberme cambiado de posición porque nunca me imaginé jugando por ahí. Al principio le decía que no quería jugar ahí, pero me ha convencido. Me ha hecho un mejor jugador desde que llegó aquí. Me tiene mucha confianza, y yo en él para que me cambiase de posición», argumentó el extremo.

Una posición sobre el terreno de juego que ocupará también contra el Borussia Dortmund mañana en Wembley, en un encuentro al que llega como gran estrella y como único jugador de los dos equipos que sabe lo que es marcar en una final de la Liga de Campeones.